Padecimientos
Algunos tipos de epilepsia en niños pueden ser curables, sin embargo siempre es recomendable acudir con un neuropediatra para valoración puesto que existen distintos tipos de epilepsia, cada uno con una presentación y pronóstico diferente.
La epilepsia es una enfermedad del cerebro que se caracteriza por una predisposición a generar crisis epilépticas. La definición es la siguiente:
Una crisis epiléptica no provocada y un riesgo de recurrencia de al menos el 60%
Para hablar de epilepsia primero se deben entender algunos términos que son importantes conocer:
Focal: Cuando ocurre en un solo hemisferio del cerebro
Generalizada: ocurre en ambos hemisferios
Existe también una clasificación sindromática que ayuda a determinar el pronóstico y, hasta cierto punto, la respuesta de forma anticipada a la medicación. Los síndromes basados en edad de presentación son los siguientes:
Neonatal
Infantil
Se caracteriza por espasmos infantiles, retraso en el desarrollo e ipsiarritmias en electroencefalograma.
Puede ser causada por un daño cerebral causado por la falta de oxígeno durante el parto (encefalopatía hipóxica isquémica) o problemas estructurales como esclerosis tuberosa o de causa desconocida.
Los espasmos suelen disminuir para la edad de 2 años, suele acompañarse de deficiencia intelectual y puede progresar al síndrome de Lennox-Gastaut.
Se presenta inicialmente con crisis epilépticas asociada a fiebre y las crisis se vuelven con el tiempo más frecuentes y prolongadas independientemente de si existe fiebre o no.
Las mioclonías (sacudidas rápidas e involuntarias de una extremidad) aparecen a la edad de 2 a 5 años y pueden progresar a ser resistentes al tratamiento. Existe una tasa de mortalidad alta puesto que los niños fallecen por crisis prolongadas que no se controlan.
Crisis epilépticas durante episodios de fiebre que duran más allá de los 6 años de edad y que llegan a desarrollar crisis no febriles.
Suelen tener historia familiar con crisis epilépticas ya que se hereda de forma autosómica dominante.
Es un síndrome común que inicia entre los 5 y los 10 años de edad y posteriormente se autolimita. Es de herencia autosómica dominante por lo que suele existir historia familiar de convulsiones. No existe ninguna alteración cognitiva o del desarrollo y suele resolverse por sí sola al llegar al final de la adolescencia.
Es un síndrome epiléptico común del cual se desconoce la causa y se caracteriza por crisis de ausencia en donde el niño pierde el conocimiento por un periodo corto de tiempo y posteriormente regresa a continuar sus actividades sin notar los episodios. Las crisis de ausencia se pueden provocar por medio de respiraciones rápidas y pueden ocurrir múltiples veces a lo largo del día. Muy pocos niños que padecen epilepsia de ausencia desarrollan crisis convulsivas generalizadas tónico – clónicas.
Se caracterizan por crisis focales que se acompañan de pérdida de la consciencia y vómito. Suele iniciar entre el año y los 14 años de edad, sin afectar el desarrollo. Las crisis suelen ocurrir en la noche y se asocian a cambios en el comportamiento: el niño se puede poner pálido, muy callado y con náuseas. Las crisis suelen ser prolongadas, llegando a durar de 30 minutos a horas pero de manera infrecuente. Las crisis suelen resolverse por sí solo en cuestión de años posteriores a su inicio.
Se caracteriza por crisis focales con alteración del estado de alerta, auras visuales y migraña. La epilepsia se desarrolla entre los 15 meses y 19 años de edad en pacientes con un desarrollo normal. Las crisis suelen remitir en cuestión de años posteriores a su inicio.
Es un trastorno crónico y generalizado que se asocia a múltiples tipos de crisis epilépticas, retraso en el desarrollo, exploración neurológica anormal y alteraciones en el cerebro que pueden evidenciarse por medio de resonancia magnética o electroencefalograma. La enfermedad suele iniciar entre los 1 y 10 años. Las crisis suelen no responder de forma apropiada a los fármacos.
Se caracteriza por un trastorno del lenguaje llamado afasia progresiva, de forma más específica los niños pueden desarrollar agnosia auditiva verbal, lo que significa que el niño no es capaz de reconocer los sonidos de las palabras. Este trastorno suele aparecer en niños de 1 a 8 años con un desarrollo de lenguaje previamente normal. Los niños que presentan este síndrome tienen de forma esporádica crisis epilépticas diversas durante la noche que suelen resolverse a la edad de los 10 años, sin embargo, pueden persistir alteraciones en el lenguaje.
La mayoría de los pacientes requerirán medicamentos para controlar la epilepsia, pero debido a que existen distintos tipos de epilepsia, no todas se pueden tratar de la misma forma, sino que se debe de individualizar, de hecho, no todos los niños con epilepsia requieren tratamiento y la decisión de recibirlo o no se lleva a cabo por la valoración de un neuropediatra quien tomará la decisión tomando en cuenta el tipo de epilepsia, el estilo de vida y las enfermedades de cada niño.