Padecimientos
Existen síntomas o datos de alarma presentes en los niños que nos hablan de su desarrollo y que pudieran hablarnos de algún tipo de trastorno o problema neurológico. Se recomienda a los padres tener conocimiento de estos para saber cuándo acudir con un neurólogo pediatra.
La neurología pediátrica es la rama de la pediatría que se encarga de supervisar el correcto desarrollo del sistema nervioso en los niños, además de tratar las alteraciones que puedan ocurrir en este. Por lo tanto, un neurólogo infantil es un subespecialista que trata cualquier padecimiento del sistema nervioso central y cualquier trastorno en el desarrollo desde los primeros meses de vida hasta los 18 años.
El sistema nervioso es uno de los sistemas más complejos e importantes de nuestro cuerpo. Se encarga de procesar toda la información que proviene tanto dentro como fuera de nuestro cuerpo y nos ayuda a regular todas las funciones de nuestros órganos y sistemas.
Son muchos los síntomas o datos de alarma que nos puedan hablar de algún padecimiento que afecte el sistema nervioso central en los niños, dentro de los más comunes se encuentran:
Existen otros síntomas o datos en los niños que nos pueden orientar a trastornos del desarrollo, por ejemplo:
Existen muchos padecimientos que pueden afectar el sistema nervioso de los niños, dentro de los más comunes y conocidos se encuentran la epilepsia, las crisis convulsivas asociadas a la fiebre, los trastornos del sueño y los trastornos del neurodesarrollo.
Dentro de los trastornos del neurodesarrollo se incluyen los trastornos del espectro autista, el TDAH (Déficit de atención, Hiperactividad), la dificultad para la comunicación como el retraso en el lenguaje y los trastornos del aprendizaje, por ejemplo, la dislexia entre otros.
Los tumores cerebrales en los niños son una causa frecuente de enfermedad en ellos e incluso de muerte. Los síntomas o datos de alarma más importantes para detectar a tiempo son los dolores de cabeza, alteración en el estado de alerta o presencia de movimientos anormales.
Existen también síntomas más específicos como alteración en los movimientos oculares o de la marcha. En presencia de cualquier dato de alarma será de suma importancia acudir con el subespecialista, neurólogo pediatra para su revisión.
Siempre que se encuentren datos de alarma o síntomas presentes en los niños como dolores de cabeza intensos y constantes, cambios en la conducta, alteración del estado de alerta o incluso movimientos anormales se debe acudir con el neurólogo pediatra, quien realizará una serie de preguntas específicas, así como exploración física que ayuden a encontrar la causa o corroborar el correcto neurodesarrollo del niño.
Cualquier tipo de problema en el aprendizaje o en la conducta de los niños debe ser referido al neurólogo pediatra para revisar un correcto desarrollo en nuestros niños y poder detectar a tiempo cualquier tipo de alteración que pueda hacer la diferencia para un buen crecimiento, aprendizaje y desarrollo.
La importancia de un diagnóstico a tiempo y un tratamiento dirigido radica en las consecuencias tanto físicas y del desarrollo como también las consecuencias emocionales, sociales y personales de los niños que pueden afectar a corto o largo plazo.
El neurólogo pediatra se encargará de evaluar la presencia de síntomas, así como el patrón de comportamiento, rendimiento escolar, relaciones sociales y patrones de conducta para realizar el diagnóstico de algún trastorno del neurodesarrollo.
En los últimos años se han logrado avances importantes en la tecnología que ayudan a realizar cada vez más diagnósticos específicos, así como tener cada vez un mejor conocimiento de los trastornos que puedan afectar el sistema nervioso de los niños, así como su desarrollo.
Una vez que el neurólogo pediatra detecte signos o síntomas presentes en los niños que pudieran relacionarse con algún trastorno del desarrollo o problema neurológico, podría indicar estudios de imagen dependiendo de la sospecha diagnóstica. Algunos ejemplos de estos estudios más comúnmente usados son la TAC (Tomografía computarizada), RMN (Resonancia Magnética) o el (EEG) Electroencefalograma.
Por ello la importancia de acudir al neurólogo pediatra una vez se haya identificado algún tipo de problema en el desarrollo neurológico de los niños, así como también para corroborar un correcto desarrollo cerebral que permita un buen aprendizaje y desarrollo.